Aprende a cuidar tu cuerpo

En esta ocasión te presentamos como puedas cuidar de tu cuerpo para mantenerte en buen estado físico y emocional.

Lo primero que debes hacer es incorporar hábitos saludables para que perduren en el tiempo y no dietas rigurosas que te cansaran y terminaras dejando de lado al cabo de un tiempo.

Incorpora una variedad de alimentos: Consume una amplia variedad de alimentos de todos los grupos alimenticios, incluyendo frutas, verduras, granos enteros, proteínas magras y lácteos bajos en grasa. Esto asegurará que recibas todos los nutrientes necesarios para mantener tu salud.

Controla las porciones: Mantén un equilibrio adecuado entre las porciones de los diferentes grupos de alimentos. Aprende a reconocer las porciones adecuadas para evitar excesos.

Prioriza alimentos frescos y naturales: Opta por alimentos frescos y naturales en lugar de alimentos procesados y ultraprocesados. Los alimentos frescos suelen contener más nutrientes y menos aditivos artificiales, azúcares y grasas no saludables.

Limita el consumo de azúcares añadidos y grasas saturadas: Reduce la ingesta de alimentos y bebidas que contengan altos niveles de azúcares añadidos, como refrescos, jugos procesados, dulces y postres. Asimismo, limita el consumo de alimentos ricos en grasas saturadas, como carnes grasas, productos lácteos enteros y alimentos fritos.

Aumenta la ingesta de fibra: Los alimentos ricos en fibra, como frutas, verduras, legumbres y granos enteros, ayudan a mantener la salud digestiva, controlar el peso y reducir el riesgo de enfermedades crónicas como la diabetes y las enfermedades cardiovasculares.

Hidrátate adecuadamente: Bebe suficiente agua a lo largo del día para mantener tu cuerpo hidratado. Limita el consumo de bebidas azucaradas y con alto contenido calórico, como refrescos y bebidas energéticas.

Planifica tus comidas: Organiza tus comidas y refrigerios de antemano para asegurarte de que incluyan una variedad de alimentos saludables. Esto te ayudará a evitar opciones poco saludables cuando tengas hambre.

Sé consciente al comer: Practica la alimentación consciente, prestando atención a tus sensaciones de hambre y saciedad, y disfrutando plenamente de cada bocado. Evita comer frente a la televisión o el ordenador, ya que esto puede llevar a comer en exceso sin darte cuenta.